Casulla con imagen de San Antonio bordado, con detalles como mantilla para el niño, azucenas matizadas en seda, cíngulo de oro… etc. con cenefa bordada en oro con dibujo geométrico. Según la Institución General del Misal Romano, documento que en su tercera edición fue promulgado de Juan Pablo II en el 2000 y que regula la celebración de la Misa en el rito romano de la Iglesia Católica, la casulla -puesta encima del alba y de la estola- es la vestidura propia del sacerdote para la celebración de la misa y los ritos directamente relacionados con ella. Igualmente los sacerdotes con celebrantes deben utilizar la casulla, pudiendo omitirla tan sólo cuando no hubiere suficientes vestiduras, aunque el celebrante principal debe siempre portarla. Conforme el Ceremonial de los Obispos promulgado en 1983, es también la vestidura exterior propia de los obispos cuando celebran la misa. La casulla debe concordar con el color litúrgico determinado por la legislación eclesiástica: blanco, rojo, verde y morado.